Sortu, el nuevo partido de la izquierda abertzale solicitó su inscripción en el Registro de Partidos Políticos. El Gobierno se opuso a través de la Fiscalía y la Abogacía del Estado y ahora es el Tribunal Supremo y concretamente la llamada «Sala del 61» la que debe decidir.Se trata de una Sala especial, formada por el Presidente del Tribunal Supremo y los Presidentes de todas las salas (Civil, Penal, Contencioso-Administrativo, Social y Militar) así como el Magistrado más antiguo y más nuevo de cada una de ellas. Las funciones de esta sala estan establecidos en el art. 61 de la Ley Orgánica del Poder Judicial, de ahí su denominación.
En todos los procedimientos de ilegalización de partidos ha resuelto siempre por unanimidad a favor de la ilegalización, así que no parece que ahora vaya a resolver e otra manera.
A mi me rechina la composición. Aunque sean «prestigiosos juristas» ¿Que sensibilidad tiene un presidente de la Sala de lo Militar acerca de la limitación de derechos políticos?
Supongo que pasarán la patata caliente al Tribunal Constitucional