Ayer tomaron posesión los consejeros del nuevo Gobierno Vasco, encabezado por Patxi López. Con esta ceremonia termina el largo proceso iniciado a partir de las elecciones del 1 de marzo. El nuevo gobierno ha marcado algunas pequeñas diferencias, de carácter especialmente simbólico, como sus apelaciones a la ciudadanía en lugar de al pueblo o a Euskadi.
A partir de ahora el nuevo gobierno deberá comenzar a gobernar. En este momento se verá si realmente quiere gobernar para todos o se inclina más por el revanchismo y el antinacionalismo, como algunos temen. En pocas semanas se podrán ver las primeras medidas.