En la madrugada del pasado domingo se produjo una violenta pelea entre un número elevado de jóvenes en las puertas de una discoteca del barrio de San Juan en Pamplona. La pelea, en la que se utilizaron cuchillos resultaron heridas cuatro personas, dos de ellas de gravedad y hubo siete detenidos.
Al parecer los implicados pertenecen a dos bandas latinas enfrentadas. Según la Policía Municipal la pelea no respondía a algo previamente planificado, sino que responde, principalmente, al abuso de alcohol.
En nuestra ciudad viven cada vez más personas emigrantes y hay muchos jóvenes entre ellos. Es necesaria la integración de todos ellos a través de la educación, el trabajo y alternativas de ocio atractivas, que no pasen necesariamente por el consumo de alcohol. Y, en todo caso, es necesario que no se permita la posesión de armas blancas, ya que su aparición puede convertir una pelea banal en una tragedia. No pido castigo, sino educación y prevención, no solo entre los jóvenes emigrantes, sino también entre los locales.