Durante la pasada noche el Juez Garzón, con la espectacularidad habitual, ha llevado acabo una operación de detención de ocho dirigentes políticos de la izquierda abertzale. Da la impresión de que este juez, tan amigo de protagonismos, intenta adelantarse a la impugnación por la Fiscalía de las listas que pretende presentar la izquierda abertzale a las elecciones vascas.
Todos los detenidos son personas que se dedican a la política y parece ser que no se les imputan otras conductas que las propias de dicha actividad